En temas relacionados con la ingeniería, hoy en día es común procesar grandes cantidades
de información, y es necesario emplear principalmente sistemas de cómputo rápidos
y con buenos recursos tales como procesador y memoria. En el mercado existen sistemas que
pueden ofrecer estos requerimientos; tal es el caso de las computadoras multiprocesador o
las llamadas supercomputadoras, pero este tipo de tecnología es muy costosa, tanto en el
precio como en el mantenimiento de los equipos.
Ante esta situación, se buscan soluciones que puedan proporcionar resultados similares, a menor
costo y escalables. Una de estas soluciones son los clusters.
¿Por qué darse a la tarea de diseñar y construir clusters, cuando hay supercomputadoras comerciales,
perfectamente buenas y disponibles en el mercado?. La respuesta rápida es el dinero.
Cuando se construye un cluster con hardware disponible en los centros de cómputo, los costos son menores comparados con el de una supercomputadora comercial, obteniendo resultados satisfactorios tomando en
cuenta el costo/beneficio.
Los primeros sistemas cluster fueron explorados por Don Becker y sus colegas en la NASA. Debido a que las
restricciones presupuestarias les imposibilitaban el acceso a una supercomputadora comercial,
ellos necesitaban analizar un conjunto complejo y muy grande de datos, que las misiones de la NASA
tienden a generar. Encontraron la forma de conseguir el rendimiento de cómputo que necesitaban.
Nombraron a su creación ``Beowulf`` en honor al héroe mítico inglés Beowulf.
Los clusters asombrosamente han llegado a tener un gran alcance. Actualmente existe un listado actualizado
semestralmente por la universidad de Manhiem en Alemania que describe las mejores 500 supercomputadoras
en el mundo, entre éstas figuran
algunos clusters. Hasta 1997, casi todos los sistemas enumerados eran los sistemas comerciales de supercomputadoras
de fabricantes bien conocidos tales como Cray, Silicon Graphics e IBM. A partir de 1998, algo extraordinario comenzó
a aparecer en la lista, los clusters basados en Linux.
El supercómputo también ha venido a desempeñar un papel importante en diferentes áreas como la ingeniería, química,
física, biología, cine, campo militar, entre otras y la tecnología de clusters ha llegado a ser cada vez más importante.
Es por ello que dentro de las áreas de investigación como la ingeniería no se pueden obviar estas tecnologías que
traen grandes beneficios para quienes saben aprovecharlas correctamente.