José Castillo Castillo.
Gracias a Dios.
A mis padres, Bertha Castillo Millán y Vidal Castillo Serrano, que siempre me han dado su apoyo incondicional y a quienes debo este triunfo profesional, por todo su trabajo y dedicación para darme una formación académica y sobre todo humanista y espiritual. De ellos es este triunfo y para ellos es todo mi agradeciemiento.
Para mis hermanos, Saúl y Susana, para que también continuen superandose. A toda mi familia, muy en especial a mi tia Felipa por todo su apoyo.
A la UNAM, la Máxima Casa de Estudios, y al Instituto de Ingeniería que con el apoyo de una beca me permitieron desarrollar este trabajo de tesis y adquirir mucha experiencia profesional. Al Doctor Gustavo Ayala Milián por el apoyo en espacios y equipo para el desarrollo de la investigación.
A todos mis amigos, amigas y todas aquellas personas que han sido importantes para mi durante todo este tiempo. A todos mis maestros que aportaron a mi formación. Para quienes me enseñaron más que el saber científico, a quienes me enseñaron a ser lo que no se aprende en salón de clase y a compartir el conocimiento con los demás.
A mi amigo y compañero de tesis Benjamín, que me enseño a salir adelante para la culminación del trabajo y a nuestro director de tesis, Ingeniero Juan José Carreón Granados por su confianza y apoyo en nuestra investigación.
Ricardo Benjamín Olvera Acosta.
Este trabajo está dedicado a toda mi familia, por su cariño y porque siempre me han apoyado. Gracias principalmente a mis padres Columba Acosta y Benjamín Olvera: quiero que sepan que para mí son los mejores, gracias por la ayuda que de ustedes y de sus parejas he recibido; éste trabajo es solo una pequeña muestra de lo mucho que les agradezco por la educación que me han brindado, esperando que mis hermanos aprendan algo de él, que les sirva como ejemplo para seguir adelante con sus proyectos de vida. Aprovecho para decirles que cuando de verdad quieran algo, luchen por ello; que cuando las cosas son difíciles se disfrutan mucho más, y que sepan que a nuestros padres no les podemos regalar algo mejor que ver a un hijo feliz por tener lo que se merece gracias a su esfuerzo: Huguín, Nancy, Uriel e Itzel, los quiero mucho.
Gracias a dios que, aunque ya no es el mismo que me enseñaron en el catecismo, me cuida siempre, me escucha las veces que lo necesito y, sobre todo, me da la fuerza para seguir adelante.
Gracias a todos y cada uno de los profesores de la FES Aragón, antes ENEP, por entregar parte de su vida para nuestro desarrollo. Gracias a la UNAM por recibirnos como a sus hijos y vernos crecer como personas y como profesionistas; gracias al Ingeniero Juan José Correón Granados por brindarnos su amistad y confianza para desarrollar este trabajo de tesis y, sobre todo, por ser la gran persona que es.
Y como dicen que detrás de un no tan gran hombre hay una gran mujer, gracias a Sara, !mi hermosa!, por estos dos años y todo lo que me has enseñado en ellos: tuve mucha suerte por haberte encontrado. Gracias también a tu familia: a María Luisa Pérez, al Sr. Sergio del Real y a Carlita por su amistad y confianza.
Gracias a todos y cada uno de mis amigos del Instituto de Ingeniería: becarios, trabajadores y secretarias, tanto de Computo como de Sismología y Mecánica Aplicada, y a algunos que en el paso de los años he tenido la oportunidad de conocer; al Dr. Francisco Chávez, al Dr. Jorge Aguirre, al M. en C. Miguel Rodríguez y al M. en I. Javier Lermo: gracias a todos por depositar su confianza en mi, por el buen ejemplo y porque, tal vez sin que lo sepan, me han inspirado para ser cada día mejor: a todos gracias por su amistad.
Gracias a las comunidades en resistencia por la dignidad que han mostrado; gracias a la comunidad del software libre que, aunque está muy lejos los unos de los otros, sus ideologías son muy parecidas: gracias por sus enseñanzas y por darme la esperanza de un mundo mejor. !Y que viva la música campesina del mundo!
Y cómo olvidar a mi compañero y amigo José Castillo Castillo por el tiempo dedicado a este trabajo y por todo lo que me ha enseñado en este proyecto de tesis: ojalá sea el primero de muchos triunfos.
Gracias a todos y cada uno de los que lean y han leído este trabajo porque, por ese simple hecho, ya forman parte de él.